Dieta saludable y equilibrada con resultados rápidos.
Para que una dieta sea saludable y equilibrada, ha de abarcar todos los nutrientes necesarios y al mismo tiempo, las cantidades deben ser adecuadas. De esta forma, nuestro organismo funcionará de forma óptima y tendrá cubiertas todas sus necesidades, sin poseer ninguna carencia, llegando a un estado óptimo de nutrición.
Según la OMS (Organización Mundial de la Salud) “Una dieta saludable ayuda a protegernos de la malnutrición en todas sus formas, así como de las enfermedades no transmisibles, entre ellas la diabetes, las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares y el cáncer.”
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¿Cómo logramos una dieta saludable y equilibrada?
Pues para lograrlo, debemos aportar la proporción adecuada de nutrientes (hidratos de carbono, grasa y proteínas, vitaminas y minerales, fibras y antioxidantes) en dependencia de nuestro peso y altura, sexo, actividad física y patologías.
Diariamente se deben tomar cantidades necesarias calculadas en gramos. Por una parte, cabe destacar la importancia de las proteínas, los hidratos de carbono y las grasas que nos aportan energía y calorías y que debemos consumir todos los días y por otra arte las vitaminas y minerales como la vitamina C y zinc, B12, folato o vitamina D, que se requieren en proporciones más reducidas.
La estructura de la dieta debe ser variada y por esta razón debemos conocer como quitar los alimentos que poseen un elevado contenido calórico, y nos aportan escasos nutrientes. Ej. Una Hamburguesa de queso solamente tiene 121 gramos y en grasa 13, si a eso le añades las papas fritas son 45 gramos más, en calorías estamos hablando más de 500, más el exceso de grasa.
Enfermedades y factores de riesgo si no existe una dieta saludable y equilibrada.
Hipertensión arterial
- Consumo incorrecto de frutas y verduras;
- Consumo excesivo de sal.
Enfermedades cerebrales, cardiovasculares y cáncer
- Consumo inadecuado de frutas y verduras;
- Consumo excesivo de ácidos grasos saturados como embutidos;
- Consumo inadecuado de alimentos ricos en fibras.
- Cáncer (especialmente de colon, mama, próstata y estómago);
- Consumo excesivo de alcohol;
- Consumo excesivo de sal
Diabetes no insulina dependientes.
- Actividad física inadecuada;
- Obesidad;
- Aporte energético excesivo (comer mucho y mal);
- Actividad física inadecuada (vida sedentaria);
- Consumo inadecuado de alimentos ricos en fibra.
Osteoporosis
- Ayuda inadecuado de calcio;
- Consumo inadecuado de vitamina D.
Con una dieta saludable y equilibrada podremos mantenernos saludables.
